Blog que reúne las entrevistas que realicé para el servicio español de la Agencia Alemana de Prensa (dpa) en los últimos 20 años.
Desde Carlos Monsiváis a Jorge Edwards, pasando por Ricardo Piglia, Siri Hustvedt, Sergio Ramírez, Elena Poniatowska, Margo Glantz, Almudena Grandes, Luisa Valenzuela, Alan Pauls, Claudia Piñeiro, Juan Villoro y Fernando Vallejo, así como el traductor del "boom" Gregory Rabassa y el poderoso agente literario Andrew Wylie.

También compila otras notas sobre vida y obra de diferentes escritores y sobre las últimas ediciones de actividades culturales como los Congresos Internacionales de la Lengua Española, la Feria Internacional del Libro de Buenos Aires y la Feria Internacional del Libro de Guadalajara.

miércoles, 22 de junio de 2016

JORGE LUIS BORGES ANALIZA EL TANGO Y SUS MITOS EN UN LIBRO INÈDITO



Jorge Luis Borges ofreció cuatro disertaciones sobre tango en 1965, que durante largo tiempo quedaron en el olvido y por estos días son recuperadas en un libro inédito, cuya publicación coincide con el trigésimo aniversario de la muerte del gran escritor argentino.
Un Borges chispeante se permite recitar e incluso cantar ante el auditorio, mientras repasa el origen, los símbolos y los mitos de la música emblemática del Río de la Plata en "El tango. Cuatro conferencias", recientemente editado por Sudamericana en Argentina.
El escritor afirma que el tango surge clandestinamente en Buenos Aires en el año 1880. Y, al igual que poco después el jazz en Estados Unidos, aparece en las "casas malas" (burdeles). Borges evoca haber visto a principios del siglo XX a parejas de hombres bailando, porque "las mujeres del pueblo conocían la raíz infame del tango y no querían bailarlo".
Pero luego los "niños bien" lo llevaron a la capital francesa. "Y cuando el baile fue aprobado y adecentado en París, entonces, el barrio Norte, digamos, lo impuso a la ciudad de Buenos Aires, que ahora lo acepta", observa el escritor fallecido el 14 de junio de 1986 en Ginebra.
Borges recuerda que inicialmente el tango es "un baile valeroso y feliz", pero luego "va languideciendo y entristeciéndose". Y no se ahorra críticas al mítico Carlos Gardel: "Tomó la letra del tango y la convirtió en una breve escena dramática, una escena en la cual un hombre abandonado por una mujer, por ejemplo, se queja".
Las grabaciones siguieron un largo periplo hasta convertirse en el libro que saldrá en España en septiembre: Le llegaron al escritor vasco Bernardo Atxaga en 2002 de manos de José Manuel Goikoetxea, a quien se las había regalado el gallego Manuel Román Rivas, que había vivido en Argentina. La viuda de Borges, María Kodama, escuchó las cintas y confirmó su autenticidad en 2013.
Hace más de medio siglo, el diario argentino "La Nación" escribía a fines de septiembre de 1965 una nota titulada "De temas del tango hablará Jorge L. Borges", anunciando un ciclo de conferencias todos los lunes de octubre.
Estos encuentros, a los que Borges prefiere denominar "charlas", se realizaron en un departamento del barrio porteño de Constitución, en el sur de la ciudad, tan entrañable para el escritor. "El sur es una suerte de corazón secreto de Buenos Aires", afirma.
Martín Hadis, especialista en la obra de Borges que trabajó en el cuidado del texto definitivo del libro, cuenta a dpa que, sobre todo al comienzo, al escritor le daba timidez dar conferencias. Pero con los años logró sobreponerse "y definitivamente se convirtió en una actividad que disfrutaba".
"Al fin y al cabo, una conferencia implica transmisión de saberes, y a Borges le gustaba compartir los temas que le fascinaban y le daban curiosidad. Este es ciertamente el caso. De hecho en estas conferencias improvisa tanto que, como solía hacerlo también al dar clase, se va por tangentes, para luego regresar al tema original, simplemente porque esas tangentes le parecen divertidas o contribuyen a retratar un clima", apunta.
Hadis -quien trabajó previamente en la edición e investigación de "Borges profesor"- analiza que, "ante otras audiencias, más masivas, Borges era minucioso y erudito. En estas conferencias sin duda también lo es, pero es cierto que además está improvisando, está hablando además sobre un tema que pertenece, digamos, a su sentir y a su esencia. Se nota que está bastante a gusto y se está divirtiendo".
Transcribir una conferencia de Borges se parece más a la labor de traducir que a un mero trabajo de copista, indica. "La complejidad de los temas y el entramado de fuentes es tal que hay que entender el tema del que Borges está hablando y saber qué piensa al respecto; también hay que conocer su vocabulario y los giros idiomáticos que usa", señala el autor de "Siete guerreros nortumbrios: enigmas y secretos en la lápida de Jorge Luis Borges" y "Literatos y excéntricos: los ancestros ingleses de Jorge Luis Borges".
Al comienzo del libro Borges rememora que con el dinero obtenido por el segundo Premio Municipal de Literatura, dedicó el año 1929 a una investigación sobre el poeta argentino Evaristo Carriego, que se transformó en un estudio sobre el mundo del tango. 
Más de tres décadas después, Borges concluye las conferencias indicando que "el tango nos da a todos un pasado imaginario", y que "oyendo el tango todos sentimos que, de un modo mágico, hemos muerto 'peleando en una esquina del suburbio'". El tango, y sobre todo la milonga, "fue un símbolo de felicidad", añade.
Hadis destaca que la escritura borgeana tiene una cadencia oral, en tanto que su discurso oral posee la precisión de sus párrafos escritos. "Esta proximidad entre lo escrito y lo oral se acentuó con el agravamiento de su ceguera. A partir de la década del '50, aproximadamente, Borges ya no escribe sus textos: los dicta. De manera que la oralidad y lo escrito se fusionan". 
Y el investigador agrega: "Borges es siempre Borges, erudito, genial, original y lúcido, cuando escribe poemas, cuando dicta conferencias, cuando da clases o cuando escribe un cuento. Siempre, esencialmente, es el mismo".
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sábado, 11 de junio de 2016

JORGE LUIS BORGES, UN DESTINO LITERARIO QUE MARCÓ EL SIGLO VEINTE

"Siempre he sentido que mi destino era, ante todo, literario; es decir que me sucederían muchas cosas malas y algunas cosas buenas, pero siempre supe que todo eso, a la larga, se convertiría en palabras", explicó alguna vez el argentino Jorge Luis Borges, uno de los escritores más influyentes del siglo XX. 
Murió el 14 de junio de 1986 en Ginebra, lejos de su Buenos Aires natal y con un enorme prestigio internacional, aunque sin adueñarse del Nobel de Literatura. "Yo siempre seré el futuro Premio Nobel. Debe ser una tradición escandinava", bromeaba Borges, quien dedicó su vida al ejercicio constante de la actividad literaria.
El precoz Georgie -como lo llamaban en su casa- nació el 24 de agosto de 1899 en pleno centro porteño y aprendió a leer en inglés antes que en castellano. Poco queda de esa ciudad que habitó sus escritos, pero lo que sí persiste, a tres décadas de su muerte, es su obra: con magistrales cuentos, poemas y ensayos se erigió en el escritor argentino más universal.
El autor de "El Aleph" y "El hacedor" trazó un inigualable universo literario habitado por espejos, laberintos, bibliotecas y tiempos circulares, donde también abundan la manipulación de la memoria y la identidad. A la vez, apeló a las citas de libros reales e imaginarios, con un estilo deslumbrante por su precisión. "Si no repito a los otros, me repito a mí mismo. Quizá yo no sea otra cosa que una repetición", decía.
Dueño de una erudición sólo comparable a su memoria prodigiosa, no incursionó en el género de la novela. "No veo una literatura sin cuento o sin poesía, en tanto que una novela de 400, 500 páginas, puede muy bien desaparecer", opinaba.
Pasó su infancia en el barrio porteño de Palermo, donde conoció las andanzas de compadritos y cuchilleros que luego habitarían sus ficciones. Tenía apenas nueve años cuando realizó su primera
traducción del inglés al castellano: "El príncipe feliz", de Oscar Wilde. En 1914 viajó con su familia a Europa y se instaló en Ginebra, donde cursó el bachillerato. En su posterior paso por España, entre 1919 y 1921, tomó contacto con el ultraísmo.
A su vuelta redescubrió su ciudad natal, que lo inspiró para su primer libro de poemas, "Fervor de Buenos Aires" (1923). Este primer ciclo poético se completó con "Luna de enfrente" (1925) y "Cuaderno San Martín" (1929). Por entonces gestó también sus primeros ensayos, "Inquisiciones" (1925), "El tamaño de mi esperanza" (1926) y "El idioma de los argentinos" (1928).
En la década del '30 inició una larga y entrañable amistad con Adolfo Bioy Casares. Compartieron numerosas aventuras literarias, como la compilación de antologías de la literatura fantástica y policial, y entre 1942 y 1977 escribieron juntos varias obras con los seudónimos de Honorio Bustos Domecq y Benito Suárez Lynch.
Borges, lector apasionado de los más diversos temas, trabajó como auxiliar desde 1937 en la Biblioteca Municipal Miguel Cané. En la década siguiente fue testigo de una experiencia histórica crucial en la Argentina, la del peronismo, al que siempre se opuso. No casualmente el gobierno de Juan Domingo Perón lo degradó en 1946 al cargo de inspector de ferias municipales. Por esa época se consagró con la publicación de los libros de cuentos "Ficciones" (1944) y "El Aleph" (1949).
Como consecuencia de una enfermedad congénita, la ceguera le sobrevino en la década del '50, aunque lo había ido alcanzando gradualmente desde la infancia. En sus propias palabras, "fue como un lento atardecer de verano", que sin embargo no le impidió seguir dictando sus obras.
El gobierno militar que derrocó a Perón designó a Borges director de la Biblioteca Nacional en 1955, cargo que desempeñaría hasta 1973. Además fue nombrado profesor de literatura inglesa en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires en 1956. Era un puesto a su medida: el escritor contaba que la primera vez que emprendió la lectura del Quijote lo hizo en la lengua de Shakespeare.
En la década del '60 comenzó a extenderse el reconocimiento a su obra. Fue galardonado con el Premio Formentor en 1961, compartido con Samuel Beckett, y el Cervantes en 1979, con Gerardo Diego. Pero no logró ser galardonado con el Nobel, lo que muchos adjudicaron a sus posturas políticas, que desagradaban a la Academia Sueca. "Todo el mundo sabe que es una cuestión política, evidentemente", aseguró su viuda María Kodama a dpa. 
Al recibir el Cervantes, Borges describió así el proceso creativo de un autor: "Tiene que sentir, luego soñar, luego dejar que le lleguen las fábulas; conviene que el escritor no intervenga demasiado en su obra, debe ser pasivo, debe ser hospitalario con lo que le llega y debe trabajar esa materia de los sueños..."
En 1967 Borges se casó con Elsa Astete, pero luego se separó y regresó a vivir con su madre, Leonor Acevedo, con quien mantuvo siempre un vínculo muy estrecho. Poco antes de morir contrajo matrimonio con Kodama, a quien conoció cuando ella era una joven estudiante. Eligió pasar sus días finales en Ginebra y pidió ser enterrado en esa ciudad, donde actualmente se encuentra su tumba, en el cementerio de Plainpalais.
En entrevista con la escritora Liliana Heker, Borges contó sus razones para seguir su incansable destino literario: "Sartre dejó de escribir cuando se quedó ciego. Yo no entiendo eso. Al contrario, yo he pensado: ahora que estoy ciego, tengo que seguir trabajando, porque ¿qué justificación tiene mi vida si no trabajo?" Y añadió: "¿Qué otra cosa puedo hacer sino escribir? Y eso no lo hago por vanidad, sino porque tengo que poblar mi tiempo de algún modo".
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MARÍA KODAMA: BORGES NO RECIBIÓ EL NOBEL POR RAZONES POLÍTICAS

A 30 años de la muerte de Jorge Luis Borges, su viuda María Kodama se muestra convencida de que el escritor argentino de mayor proyección universal no ganó el Premio Nobel de Literatura por razones políticas. En diálogo con dpa, rememora por otra parte un reencuentro del autor de "El Aleph" con Julio Cortázar en el Museo del Prado de Madrid.
Sobre la cuestionada decisión de la Academia Sueca de no concederle el galardón a Borges, una de las figuras más prominentes de las letras del siglo XX, asegura: "Todo el mundo sabe que es una cuestión política, evidentemente". 
La esposa de Borges y heredera de su legado cuenta que el escritor recibió una llamada desde Suecia antes de ir a aceptar un doctorado de una universidad chilena durante el régimen del dictador Augusto Pinochet, en la que se le habría insinuado que reviera esa decisión.
Kodama brinda su testimonio en detalle sobre esa comunicación telefónica: "Era un periodista, creo. (Borges) Me dice 'no nos hagamos ilusiones' y va hasta el teléfono. Cuando él hablaba por teléfono yo me iba, porque era su intimidad. Entonces me agarra del brazo para que no me vaya".
"Le dijo 'mire, yo le agradezco muchísimo su preocupación, pero hay dos cosas que un hombre no puede permitir: sobornar o dejarse sobornar. Muchas gracias por llamarme, buenas tardes' y colgó", refiere la escritora y traductora, que conoció a Borges cuando era una joven estudiante.
"La gente es muy perversa, porque cuando un hombre como él recibe un doctorado, el presidente del país es protocolo que vaya. Cuando fue en Francia, estaba Mitterrand, cuando fue en Inglaterra, el marido de la reina bajó en un helicóptero en los jardines de la universidad para un almuerzo que daban en honor de Borges. Pero la gente es muy muy perversa, y entonces empezaba 'que Pinochet, que esto, que lo otro'", explica. "Él no fue invitado por Pinochet, sino que fue invitado por la Universidad Católica", subraya.
Kodama relata el diálogo que mantuvieron tras la llamada. "Le pregunté '¿no quiere pensarlo? Puede decir que está mal, que está enfermo, lo que quiera'. Y me dijo '¿usted haría eso?' 'Usted sabe que no'. '¿Y por qué quiere que yo lo haga?' 'No, yo no quiero que lo haga, yo le pregunto'". 
Entonces Borges la abrazó, le pidió que olvidaran el tema y siguieran con la traducción que estaban haciendo. "Se terminó, nunca más se mencionó el tema. Además él sabía que lo había acabado él mismo. Al decir eso, ya lo sabía", señala.
La presidenta de la Fundación Internacional Jorge Luis Borges destaca que, junto con su literatura, lo que más admira del autor que quedó ciego en la década del '50 es justamente esa virtud "de no dejarse manejar, de ser libre". "Eso me fascina en una persona, la libertad".
Encuentro único ante "Perro semihundido"
Kodama describe asimismo con emoción el momento del encuentro entre los dos gigantes de las letras argentinas, Borges y Cortázar, delante del "Perro semihundido" de Goya en el Museo del Prado.
"Soy miope, de lejos no veo, pero era imposible no ver una figura de dos metros de alto que avanzaba", apunta en referencia al espigado escritor que vivía en París.
"A mí me gusta mucho la obra de Cortázar. Entonces le digo emocionada, 'ay, Borges, ahí viene Cortázar'. Él me responde 'y usted querrá saludarlo' y yo, 'como usted quiera'. Antes de que terminara de decir 'como usted quiera', Cortázar estaba abrazándolo y diciéndole 'maestro, usted publicó mi primer cuento', que era 'Casa Tomada', 'yo lo admiro'. Y entonces él ahí cambió, por supuesto".
La distancia entre el autor de "El Aleph" y el de "Rayuela" se produjo "a raíz de la política, porque Cortázar estaba en la posición contraria a la de Borges", considera. Por lo tanto, "ese encuentro fue maravilloso, ver a los dos escritores cuyos cuentos para mí son maravillosos, delante del 'Perro semihundido' de Goya... me quedó como un 'slide' o, como dicen ahora, una 'selfie' para toda mi vida", apunta Kodama. "Un momento único, magnífico".
A la pregunta de cuál es actualmente la mejor manera de cuidar el legado borgeano, la viuda -que impulsó varias causas judiciales con ese fin- manifiesta: "Tratando de que no lo arruinen, tratando de que sea respetado. Es una tarea muy complicada".
La tumba de Borges en Ginebra
Kodama cree que el autor de "Ficciones" -que no inscribió su nombre entre los ganadores del Nobel, pero sí se adjudicó el Premio Cervantes y el Formentor, entre otros- pudo sentir el reconocimiento que merecía antes de morir el 14 de junio de 1986. 
"Justamente antes de ir a Ginebra, de partir, él sabía que partía, tuvo una gira impresionante de homenaje en Italia", indica. "Realmente fue maravilloso, incluso él pudo ver una retrospectiva de (Johann Heinrich) Füssli", el pintor de "La pesadilla", cuadro al que admiró.
Kodama recuerda a su marido como un hombre conversador. "Por ejemplo los que lo adoraban eran los conductores de taxi. Él andaba siempre de un lado para el otro en taxi. Entonces abría la billetera y decía 'sírvase'. 'No, maestro', le decían. Nadie le cobraba".
También evoca que a Borges le gustaba mucho andar por las calles de Buenos Aires, la ciudad en la que nació en 1899 y que habitó su literatura. "Caminábamos por Florida, por San Telmo, la parte de la biblioteca antigua de (la calle) México, y a veces por el zoológico para ver a los tigres, que él amaba y yo también".
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martes, 24 de mayo de 2016

JEANMAIRE TEJE UNA NOVELA SOBRE LA IDENTIDAD ENTRE CHINA Y ARGENTINA

El escritor argentino Federico Jeanmaire, quien vuelve al territorio de la novela con "Tacos altos", protagonizada por una adolescente de origen chino criada en Argentina, asegura que "la identidad es el gran tema del siglo XXI".
"En este momento del mundo hay muchísimas necesidades de que la gente se mueva. Ese movimiento por ahí no es querido ni deseado, sino que es simplemente salvarse de algo, buscar trabajo... eso te ubica en un lugar bastante extraño, en el cual todo lo automático que tenés de la cultura de nacimiento en algún punto se pone en duda, y también se pone en duda lo automático de la cultura que te va a recibir", dice a dpa.
El libro -recientemente publicado por Anagrama en Argentina, Chile, Colombia, Uruguay y España- está surcado por preguntas e incertidumbres vinculadas con la identidad cruzada y también por el tránsito de la protagonista de niña a mujer, hasta calzarse los tacos (tacones) altos a los que hace referencia el título.
Jeanmaire afirma que la novela surgió de su gran interés por la cultura china y también por los inmigrantes chinos en Argentina. "Tengo buena relación con ellos desde siempre. Yo trabajo en una biblioteca a la noche y siempre hubo muchos chinos".
El especialista en "El Quijote" y autor de numerosas novelas con las que ganó algunos de los principales premios literarios de Argentina, como el Emecé 2008 ("Vida interior") y el Clarín 2009 ("Más liviano que el aire"), cuenta que destinó el dinero de este último galardón a viajar por China con su hijo.
"Supongo que lo que te llama siempre más la atención de las culturas es lo que no comprendés, lo que imaginás. Los chinos son algo desconocido, al menos para mí, y lo desconocido siempre te atrae. Cuando volví de ese viaje sabía que en algún momento iba a escribir una novela china", apunta Jeanmaire (Baradero, 1957).
En diciembre de 2013 hubo un intento de saqueo en el suburbio bonaerense de Glew y murió incendiado el dueño chino de un supermercado. "O bien no pudo o no quiso salir, porque estaba atrincherado y no quería entregar nada. Fue una noticia que salió muy pequeñita en dos diarios digitales y me interesó mucho el hecho", expresa.
"Me pareció algo muy lindo para empezar a pensar una novela, qué hay en la cabeza de un chino en Glew", señala. Sin embargo, con el correr de la escritura, ganó protagonismo la hija de este personaje. La novela se divide en dos partes, Suzhou y Glew, escenarios respectivos de la trama en China y Argentina. Jeanmaire cuenta entre risas que no conoce el suburbio en la provincia de Buenos Aires, pero sí la lejana Suzhou.
Suzhou, uno de los escenarios de la novela
La protagonista pasó muchos años en Glew, donde su padre tenía un supermercado, y luego vive con sus abuelos paternos en Suzhou. Allí recibe una oferta laboral que le permite regresar a Glew y saldar cuentas con el pasado. Su retorno "es un momento bisagra. Porque en principio ella no se lleva bien con esos tacos, pero descubre que la convierten en otra persona. Ese es un cambio fuerte que tiene en la novela y en su vida".
Al autor de "Mitre" y "Montevideo" le atrae especialmente enfocarse en el problema de la lengua. "Primero porque trabajo con la lengua, soy escritor, y segundo porque la lengua es como el gran recipiente de la identidad. Entonces una novela sobre la identidad cruzada por una lengua así, artificial y rara, está bien".
Y es que, a sus 15 años, la joven de "Tacos altos" escribe para no olvidar el castellano, y lo hace en presente por su dificultad para manejar los tiempos verbales. "Sobre todo al principio uno no sabe cuándo es que pasa cada cosa. La lengua china cuenta con esa particularidad, que no tiene tiempos verbales, solamente avisa con palabras muy específicas. Y en castellano quedaba muy atractivo", considera.
Glew, donde vivió la protagonista de la novela.
Jeanmaire destaca entre las particularidades de la cultura china que "es bastante cerrada, tradicionalista, muy apegada a sus creencias y a sus supersticiones. El chino sale, migra, pero cría a su descendencia como si estuvieran en China, porque la idea siempre es volver".
Asimismo sostiene que no le gustan "los libros que proponen lecturas unívocas". Por eso se muestra a favor de, "para decirlo en términos brutales, la literatura propositivamente ambigua. Supongo que eso me viene del Quijote", señala.

"Me parece que eso es lo peor de la literatura del siglo XX, lecturas muy fáciles, donde uno no puede sino estar de acuerdo o en desacuerdo con lo que está leyendo, pero no le queda ninguna posibilidad de trabajar el texto, de ser parte del hecho literario", agrega.
Autor de "Miguel", biografía ficticia de Cervantes con la que fue finalista del Premio Herralde, y del ensayo "Una lectura del Quijote", Jeanmaire considera que la célebre novela tiene para él una importancia "absoluta". "Hace 30 y pico de años que lo leo, y de hecho doy cursos del Quijote para volver a leerlo. Aprendí de eso, entonces está muy marcado en mi estética".
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sábado, 30 de abril de 2016

MILENA BUSQUETS, DEJARSE LA PIEL Y ESCRIBIR DESDE LA EDAD ADULTA



La española Milena Busquets, autora de "También esto pasará", cuenta a dpa que se dejó "mucho la piel" en su segunda novela, que ya fue traducida a 30 lenguas y será llevada próximamente al cine.
Busquets, una de las invitadas estelares de la 42 Feria Internacional del Libro de Buenos Aires, escribió "También esto pasará" luego de lo que define como "un punto de inflexión" en su vida: la enfermedad y muerte de su madre, la mítica editora Esther Tusquets.
"Creo que a partir de ahí abandono definitivamente la niñez en la que había vivido cómodamente instalada y entro en el mundo de los adultos. Si lo que quieres es escribir, es mejor ser adulto. Por muy niña inteligente que seas, has de escribir desde la edad adulta", afirma tras su participación en la feria.
Mientras la novela se publicará en mayo en Estados Unidos y Reino Unido, la escritora no se presiona de cara al futuro: "Este éxito no se va a repetir así, es imposible. Habrá un tercer libro, ya veremos cómo sale, yo espero que haya un cuarto, un quinto".
En "También esto pasará" (Anagrama), Blanca, alter ego de Milena, acaba de perder a su madre y para aliviar su dolor viaja a Cadaqués, el pequeño pueblo de los veranos de su infancia. Entre el desgarro de la ausencia y la reafirmación de la vida, lamenta: "Cuando el mundo empieza a despoblarse de la gente que nos quiere, nos convertimos, poco a poco, al ritmo de las muertes, en desconocidos".
Busquets (Barcelona, 1972) atribuye el "tsunami literario" que generó su novela a que se centra en la compleja relación madre-hija, "que no está tan tratada en la literatura". Asimismo se lo explica por "la forma de escribir, como tan cercana a la forma de hablar, que en realidad está muy trabajada".
"La gente ve que no hay ninguna pretensión y en la literatura hay tanta pretensión, tantos decorados, tantas cortinas. Mucha gente escribe muy bien, pero falta electricidad, falta pasión, y creo que en este libro está esto. Está muy claro que me he dejado mucho la piel en el libro y la gente lo notó", cree.
Busquets, quien también trabajó en el sector editorial, apunta: "No me gusta nada el mundo intelectual cuando se convierte en una cosa impostada, de sentido de superioridad. Creo que nadie es superior por leer, no me parece que el mundillo editorial sea más digno que el mundillo de los fabricantes de zapatos". 
Los egos no tienen ninguna utilidad, advierte la autora. "Sobre todo no sirve para escribir, te aleja de la gente. Y es una chorrada porque al final todos vamos a morirnos, a todos nos han abandonado, a todos nos han roto el corazón, todos nos hemos quedado sin dinero, seas editor o no".
A la pregunta de si en algún momento se sintió expuesta al transformar vivencias personales en literatura, reflexiona: "Cuando lo escribía no pensaba que estaba siendo impúdica ni que estaba siendo valiente. No te lo planteas, porque te metes como en una especie de túnel, y claro, has de entrar desnudo en este túnel de alguna manera". En un libro tan personal, "si quieres hablar de sentimientos y de sentimientos actuales que son los que sentimos todos, la gente nota cuando estás contando una mentira".
Los derechos de "También esto pasará" fueron comprados por el director de cine y productor argentino Daniel Burman ("El abrazo partido"). "Tuve reuniones con productores franceses y españoles y con el que más me entendí pues es con Daniel. Somos muy parecidos argentinos y españoles. Creo que será un viaje muy divertido", se entusiasma y adelanta que la película se rodará en Cadaqués.
En 2008 Busquets publicó su primera novela, "Hoy he conocido a alguien", que asimismo gira en torno a una protagonista femenina. "No creo que nunca ponga un personaje masculino en el centro de la historia, porque no me veo. Me interesan mucho los hombres y estoy muy atenta a ellos, pero no sé si sabría hacerlo". 
Busquets analiza que desde aquel libro pasaron varios años en los que la vida se le puso "al revés" y finalmente se permitió hablar "un poco en serio de algunas cosas". Y dice: "Las cosas serias e importantes las hacía mi madre o la otra gente, yo no, yo era la niña graciosa".
Esther Tusquets
Asimismo manifiesta sentirse "muy en deuda" con aquella generación de mujeres como Esther Tusquets, "que hicieron cosas muy importantes, tuvieron que luchar para conseguir cosas básicas como el divorcio". "Estudiaron, trabajaron, se separaron, tuvieron hijos fuera del matrimonio. Mi madre no se casó con mi padre. Yo era la única niña del colegio con padres no casados".
Busquets creció entre figuras de la talla de Ana María Moix y Ana María Matute. "Veía que eran mujeres bastante impresionantes. Había como una fuerza, una vitalidad, unas ganas de luchar, que era muy fascinante incluso para una niña de siete años. Haber conocido a Ana María Matute es de las cosas que me alegro. Pues me enseñó que a veces la gente con más talento es la gente con más sentido del humor, más natural, más generosa".
La hija de la fundadora de Lumen descree del poder redentor de la escritura. "Leer me ha salvado en muchos momentos", señala. "Tengo una deuda increíble con los libros. De repente estás mal, estás solo, y coges el libro adecuado y hay libros que te salvan. Pero escribir no, porque escribir es un trabajo".
Busquets evoca a su madre como "una mujer increíblemente trabajadora" y "una editora de raza" y confiesa que sigue extrañándola a diario. "Cada vez que me pasa algo bueno, me gustaría compartirlo con ella. Cada vez que estoy triste o que me siento sola, me gustaría que estuviese ahí".
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miércoles, 27 de abril de 2016

MARÍA KODAMA: "BORGES, COMO LOS ANTIGUOS GRIEGOS, PERTENECÍA A SU CIUDAD"

Jorge Luis Borges funda míticamente su ciudad, la canta a través de sus poemas, la narra a través de sus cuentos, afirma su viuda María Kodama en el prólogo de "Borges cuenta Buenos Aires". En diálogo con dpa, Kodama asegura además que el escritor argentino, "como los antiguos griegos, pertenecía a su ciudad".
A casi tres décadas de la muerte del autor de "El Aleph", Kodama presentó en la 42 Feria Internacional del Libro de Buenos Aires este libro que reúne 12 relatos borgeanos -entre ellos "El Sur", "El libro de arena" y "Hombre de la esquina rosada"-, acompañados por imágenes de Carlos Greco.
La esposa de Borges y heredera de su legado se muestra complacida con el acento que pone la cita editorial en recordar al escritor nacido en 1899 a través de diversas actividades. "Borges siempre era una figura familiar y cuando estaba en Buenos Aires venía siempre a la feria, así que pienso que es muy lindo esto, que la feria le rinda homenaje a los 30 años de su partida".
Kodama cree que "Borges, como los antiguos griegos, pertenecía a su ciudad. Los griegos decían por ejemplo 'Zenón de Elea', siempre era el lugar donde habían nacido lo que correspondería a lo que ahora es el apellido. Y pienso que con Borges y Buenos Aires se produce eso también. Nació en Buenos Aires y Buenos Aires es para él casi su propio ser".
La escritora y traductora apunta que la ciudad a orillas del Río de la Plata se encuentra desde siempre presente en la literatura borgeana. "El tema de Buenos Aires está desde 'Fervor de Buenos Aires', que es el primer libro que él escribe en el año 1923 cuando vuelve de Europa, hasta el final de su vida, es decir a través de toda su obra".
La relación del autor argentino de mayor proyección universal con su metrópoli variará a lo largo de su vida. "Primero es el descubrimiento de esa ciudad cuando él vuelve y después cómo va sufriendo él el cambio que va teniendo esa ciudad. Hasta que al final dice que la ciudad que él conoció ya no existe, porque lógicamente ha sido objeto del cambio natural del tiempo y de la gente", analiza Kodama.
"Finalmente dice que todo eso no importa, porque un día el obelisco será talado, no existirá más, pero habrá un poeta que cante a esa otra ciudad que él ya no podría reconocer. Va a cantar a esa ciudad y a través de eso la ciudad es eterna", señala Kodama, que participará en los próximos días en otras actividades que la feria dedica al escritor, como el Encuentro Internacional "Un Borges para el siglo XXI".
En la tapa del libro de gran tamaño editado por emecé se ve a Borges con un bastón en la mano izquierda y un puñal en la derecha. "Borges cuenta Buenos Aires" está cruzado por imágenes de viejas casas de ladrillo con antiguas puertas y ventanas, majestuosas estaciones ferroviarias y otros edificios históricos y monumentos de la ciudad, junto a cuchillos, laberintos y felinos presentes en su universo literario.
A la presidenta de la Fundación Internacional Jorge Luis Borges le agrada que no sean "imágenes convencionales", ya que el volumen muestra una Buenos Aires que no es la de los libros turísticos, "como si fuera buscando lo que es la esencia de los cuentos".
Mientras tanto, varias ciudades se sumarán a las conmemoraciones internacionales por el trigésimo aniversario de la muerte de Borges el 14 de junio de 1986 en Ginebra. Kodama, quien conoció al escritor cuando era una joven estudiante, adelanta: "Estamos organizando junto con la embajada y la Fundación Bodmer en Ginebra el gran homenaje. Y va a haber también un homenaje que ya comenzó en España, que de Madrid va a ir a Sevilla".
"Y como cierre también organizamos con el Instituto Cervantes de Nueva York en la primera quincena de diciembre un gran homenaje, porque la biblioteca del instituto tiene el nombre de Borges. Entonces se celebran las dos cosas, los 25 años de la biblioteca y los 30 años de la partida de Borges", cuenta.
Kodama asimismo evoca sus momentos de trabajo junto al escritor, que había quedado ciego en la década del '50 y dictaba sus textos. "Escribía cuando quería, como él decía, cuando la musa aparecía, sino no. Recuerdo una vez que un muchacho llegó y le dijo 'maestro, estoy desesperado. Me siento todas las mañanas ante el papel en blanco y no se me ocurre nada'. Y Borges le dice: '¿no sería mejor esperar a que se le ocurra algo para ponerse frente al papel en blanco?'", recuerda risueña.
Si Borges pasaba un tiempo sin escribir, no lo vivía "como algo dramático". "Leíamos, nos divertimos muchísimo. Evidentemente fui el amor de su vida y el amor de mi vida fue él, sino 30 años después no voy a seguir con él, si no hubiera sido así", subraya.
A la pregunta de si el cuentista, poeta y ensayista fue consciente de la fama que alcanzó, contesta sin dudar: "Lo vivía inocentemente, no era una persona jactanciosa, ni una persona que quisiera estar en un primer plano, eso se lo daban los otros. Él decía que su obra era una equivocación".
Kodama manifiesta no extrañar a Borges: "Es una sensación rara, porque todos ustedes me ayudan a tener como 'el milagro secreto'. Porque el hecho de que lo nombren, de que organice conferencias, de que dé conferencias, todo eso hace que yo sienta, aunque sé que él no está, que está vivo. Interiormente está en mí, es una presencia permanente".
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domingo, 24 de abril de 2016

PAULO VALENTE, HIJO DE LISPECTOR, ENTRE LA LITERATURA INFANTIL Y EL RECUERDO DE SU MADRE

Paulo Valente junto a su madre, Clarice Lispector
Paulo Gurgel Valente tuvo una excepcional maestra en materia de narrar historias: su madre Clarice Lispector, una de las escritoras brasileñas más importantes del siglo XX. Junto a su profesión de economista, él decidió continuar por el camino de la literatura infantil.
Por estos días visitó la 42 Feria Internacional del Libro de Buenos Aires para presentar "El león ya no quiere rugir", destinado a los lectores más pequeños. Y en diálogo con dpa, rememora cómo nació a expreso pedido suyo el primer libro para niños de Lispector, "El misterio del conejo que sabía pensar" (1967), durante los años que la familia vivió en Washington.
"Yo le pedí 'tú escribes tanto, quiero un libro para mí y tiene que ser ahora', como hacen los niños. Nosotros teníamos un conejo en una jaula en un garaje de la casa que escapaba, no obstante que la jaula era muy apretada. Nunca se supo cómo escapaba", relata el hijo de la escritora y el diplomático Maury Gurgel Valente.
"Ese libro quedó guardado como un asunto familiar, hasta que un día llamó una editorial preguntando por un libro infantil y ella dijo 'tengo una historia que hice para mi hijo' y ahí fue publicado". Lispector escribió esa historia originalmente en inglés, el idioma que se hablaba en la casa, y ella lo tradujo al portugués, cuenta Valente.
Además recuerda que su visita al megaevento cultural porteño se produce exactamente 40 años después de la que realizara Lispector. "Y a ella le gustó mucho, porque firmó libros y el público fue muy cálido. Se sintió muy bien, dijo que se sentía como una estrella de cine".
Lispector, quien se dio a conocer con "Cerca del corazón salvaje" (1944), es autora de una vasta obra compuesta por novelas, cuentos y también crónicas. Su traductor al inglés Gregory Rabassa dijo alguna vez que esta bella mujer "se parecía a Marlene Dietrich y escribía como Virginia Woolf".
Nacida en Ucrania en 1920, llegó a Brasil con apenas dos años, país al que consideró su patria y en el que falleció en 1977. Respecto de cómo su madre forjó una voz literaria tan singular e irrepetible, Valente apunta sin dudarlo a "esta cuestión de lo ajeno, de la circunstancia de ser de otro lugar".
El brasileño, quien reside en Río de Janeiro y además de libros infantiles también publicó para adultos, participó en un homenaje a la autora de "La pasión según G.H." en el marco de la feria que se extiende hasta el 9 de mayo en la capital argentina.
Valente da testimonio asimismo de la rutina de escritura de Lispector en su intimidad: "Se levantaba muy temprano, como a las cuatro de la mañana. Y se quedaba solita con su cigarrillo y un café, y ahí tenía un momento bastante largo hasta las siete de la mañana para trabajar".
Y rememora que le era familiar sentir el repiqueteo de las teclas de la máquina de escribir, que le llegaba desde la sala donde su madre trabajaba.
A la pregunta de si Lispector corregía mucho sus textos, responde que sí. Y cita el caso de la novela "La manzana en la oscuridad" (1961): "Ella misma dijo que lo repasó ocho veces, y es un libro de 400 páginas. Rehacer es escribir todo con la máquina, es un esfuerzo físico".
Paulo, el segundo hijo de Lispector nacido en 1953 en Washington, escribió poesía y cuenta con una decena de libros publicados, entre ellos cinco de economía y finanzas.
"El león ya no quiere rugir", ilustrado por la argentina Irene Singer, es uno de los títulos que abre la colección de literatura infantil "Puentes de Papel" de la editorial argentina Corregidor.
Valente se inspiró para su libro en "Carnaval de los animales" del compositor francés Camille Saint-Saens. En sus páginas traza la colorida historia de un león que está cansado de ser el rey de la selva, por lo que busca a un animal que lo suceda, en lo que define como "un cuento muy político". 
"El libro es contra el autoritarismo, no se puede tener un rey león permanente", afirma. Y luego añade: "Nada aquí está cerrado, se juntan diversas cuestiones para que pueda haber una discusión entre padres e hijos, creo que es un libro para leer en familia".
Respecto de la elección del lenguaje del cuento, que no elude la complejidad, asegura: "Mi madre decía que uno no debe subestimar a los niños, ellos están muy preparados".
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martes, 19 de abril de 2016

VARGAS LLOSA Y COETZEE ENGALANAN 42 FERIA DEL LIBRO DE BUENOS AIRES

Dos premios Nobel de Literatura, el peruano Mario Vargas Llosa y el sudafricano John Maxwell Coetzee, le darán brillo a la próxima Feria Internacional del Libro de Buenos Aires, que abrirá sus puertas al público el próximo jueves, con Santiago de Compostela como ciudad invitada de honor.
Será la primera vez que dos galardonados por la Academia Sueca coincidan en la prestigiosa cita porteña, que en su 42 edición homenajeará con diversas actividades al gran escritor argentino Jorge Luis Borges, a tres décadas de su muerte, y a los clásicos Miguel de Cervantes Saavedra y William Shakespeare, a 400 años de su fallecimiento.
Vargas Llosa llegará con su nueva novela "Cinco esquinas" bajo el brazo, mientras que Coetzee participará en la mesa redonda "De la escritura a la edición. Un ejercicio de comparación entre Australia y Argentina".
La tradicional fiesta de las letras e importante referente a nivel latinoamericano asimismo recibirá a escritores que protagonizaron fenómenos editoriales como la española Milena Busquets, autora de "También esto pasará", y el italiano Paolo Giordano, que saltó a la fama con "La soledad de los números primos".
Otros nombres destacados que caminarán por el predio de La Rural hasta el 9 de mayo son la narradora y periodista española Julia Navarro, el nicaragüense Sergio Ramírez, el escritor y periodista peruano Jaime Bayly, así como el autor brasileño de literatura infantil Paulo Valente, hijo de Clarice Lispector.
El evento organizado por la Fundación El Libro -que con sus 45.000 metros cuadrados convoca anualmente a más de un millón de visitantes- tendrá este año a Santiago de Compostela como ciudad invitada. Así se reforzarán los vínculos que comenzaron con los primeros movimientos migratorios de la colectividad gallega -mayoritaria en el país entre las de origen español- hacia Argentina.
La capital de la comunidad autónoma de Galicia promocionará su cultura desplegando un stand de 200 metros cuadrados en el Pabellón Amarillo. También traerá una importante delegación de 25 personalidades, entre ellos Manuel Rivas, quien presentará la Cátedra Galicia-América. 
En tanto, el protagonista de la inauguración oficial el jueves por la noche será el escritor argentino Alberto Manguel ("Una historia de la lectura"), quien asumirá a mediados de año como director de la Biblioteca Nacional.
Al cumplirse próximamente 30 años de la muerte del autor de "El Aleph", el 14 de junio de 1986 en Ginebra, la feria dedicará su Encuentro Internacional a destacar la gravitación borgeana, con participantes como su viuda María Kodama y el español Vicente Cervera Salinas, del 29 de abril al 1 de mayo.
Además se presentará el libro "Borges cuenta Buenos Aires", con 12 de sus relatos, prólogo de Kodama y fotografías de Carlos Greco. A la vez, diversos paneles reunirán a especialistas que analizarán la vida y obra del escritor argentino de mayor proyección universal.
También tendrá su espacio durante la cita el tributo a los clásicos: el Maratón de la Lectura recorrerá textos de Shakespeare el día 25, mientras que Cervantes será homenajeado en diferentes actividades que reflexionarán sobre su vigencia del Siglo de Oro al siglo XXI.
Autores de todo el continente se darán cita en el Diálogo de Escritores Latinoamericanos, entre el 30 de abril y el 3 de mayo, para debatir sobre problemas literarios comunes. Los colombianos Laura Restrepo, Pablo Montoya y Piedad Bonnett, el nicaragüense Ramírez, el mexicano Antonio Ortuño, los argentinos Andrés Neuman y Alan Pauls y los chilenos Alberto Fuguet y Carlos Franz serán algunos de los que intervendrán en la cuarta edición del Diálogo.
Convertido en una verdadera ciudad de libros, el evento en el barrio porteño de Palermo cuenta con alrededor de 1.500 expositores de más de 40 países y ofrece asimismo una programación de más de 1.000 actos culturales a lo largo de sus 19 días.
Ya antes de que la tradicional feria abra las puertas a su fiel público, desde hoy y hasta el jueves se llevan a cabo las Jornadas Profesionales. Este espacio privilegiado de intercambio entre todos los actores de la industria convoca cada año a más de 12.000 asistentes.
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lunes, 14 de marzo de 2016

LA LENGUA ANDARIEGA DE CERVANTES SALE A DEBATE EN PUERTO RICO

El VII Congreso Internacional de la Lengua Española en Puerto Rico debatirá desde el martes sobre un idioma andariego y vital que no se cansa de traspasar fronteras. Y a 400 años de la muerte de Miguel de Cervantes, la cita se celebrará nada menos que en el estado libre asociado de Estados Unidos que mantiene su fidelidad al español.
Entre las 150 personalidades que intervendrán en el programa académico sobre la segunda lengua materna del mundo se cuentan los escritores Antonio Skármeta, Sergio Ramírez, Edmundo Paz Soldán y Eduardo Lalo, quienes adelantan algunas impresiones a dpa.
"El español es una lengua viva, que se multiplica y extiende, y merece un debate continuo acerca de sus alcances. No sólo las reglas bajo las que se habla, sino su peso social, sus alcances culturales, en el aula, en la literatura, en los medios de comunicación", afirma el nicaragüense Ramírez (1942), quien cosechó numerosos aplausos con su discurso en la inauguración del anterior Congreso de la Lengua en Ciudad de Panamá.
Edmundo Paz Soldán
En tanto, el boliviano Paz Soldán (1967) considera que el idioma "está en constante movimiento. El español de hace seis meses no es el mismo de hoy. Llegan nuevas palabras, a caballo de las nuevas tecnologías, algunas inventadas, otras adaptadas o desempolvadas con nuevos usos, otras apropiadas de otros idiomas, y también, todos los días, mueren otras palabras, porque ya no nos sirven o se han vuelto muy anticuadas".
"De modo que debatir el futuro del idioma es en realidad debatir el presente del idioma: es como sacarle una foto a la calle de hoy. En seis meses esa foto será muy diferente, y por más que nos esforcemos en analizar tendencias, en materias de lenguaje siempre hay sorpresa", reflexiona el autor, uno de los máximos representantes de la denominada Generación McOndo.
Paz Soldán, quien reside en Estados Unidos, señala que "San Juan es un lugar ideal para ver estos cambios, porque hay pocos países como Puerto Rico, tan consciente del diario trasvase que significa vivir entre lenguas. En cierta forma todos vivimos así, pero los puertorriqueños más que nadie”.
Desde la visión del puertorriqueño Eduardo Lalo (1960), "la aberrante y trasnochada condición colonial de Puerto Rico no niega el hecho de que este país es parte de América Latina. Si algo han demostrado los puertorriqueños es la singular capacidad de resistencia de su cultura y de su lengua".
Eduardo Lalo
"Puerto Rico es tan hispanohablante como la Argentina o España. La educación se imparte en español y todos los intercambios sociales se hacen en esta lengua. El que se celebre aquí este congreso no es más que reafirmar esta realidad", asevera.
Bajo el lema "Lengua española y creatividad", San Juan será anfitriona hasta el viernes 18 de la séptima edición de la cita sobre el idioma, con casi una veintena de participantes puertorriqueños, poniendo en el foco la situación lingüística en ese territorio.
Al igual que todo congreso, el de las Academias de la Lengua Española significa un lugar de encuentro, indica Lalo, el primer puertorriqueño en lograr el Premio Rómulo Gallegos con su novela "Simone". "En este caso se trata de hablantes y pueblos que se expresan en una amplia variedad de usos del español. Las relaciones entre estos hablantes y pueblos es asimétrica".
"La lengua es de todos, pero esta evidencia no siempre es asumida por algunos miembros de la comunidad. El congreso de San Juan provee un espacio privilegiado para explorar la posibilidad de igualdad, respeto y representatividad entre grupos de hispanohablantes que no comparten necesariamente un mismo nivel simbólico", advierte.
Antonio Skármeta
Skármeta (1940), en tanto, opina que Puerto Rico ha mantenido "con orgullo y creatividad el español, como lo demuestra su pueblo, que quiere la hermandad latinoamericana para su cultura. Sus formidables escritores y académicos combinan de maravillas la profundidad de sus meditaciones con una prosa dúctil a la calidez de su gente".
El autor de "Ardiente paciencia" dice asimismo que el español sigue entendiéndose con la tradición. "Se desarrolla con una vivacidad que al mismo tiempo permite una fecunda convivencia con la tradición. Este aspecto será muy destacado, pues este año se cumplen 400 años de la muerte de Cervantes, nuestra figura tutelar e inspiradora a lo largo de siglos".
Necesariamente una lengua "recibe la energía del cambio de los tiempos y las diversas culturas con las que se relaciona", apunta el chileno, que participará en la mesa redonda sobre "Tradición y creatividad: Las lecciones cervantinas". Y agrega: "Personalmente trabajo desde la espontaneidad de mi habla, pero admito que frecuentemente quedo extasiado al leer las obras de clásicos españoles y lamento que hayamos perdido parte de ese brillo y elocuencia".
En cuanto a los desafíos del español, que unos 470 millones de personas tienen como lengua materna, Ramírez se refiere al reto de "la vitalidad en la diversidad". "Una lengua muta en la medida que viaja, y se enriquece, como está ocurriendo ahora con el español que se habla en Estados Unidos: es otro, pero sigue siendo el mismo; igual que el español cuando el árabe entró en él".
"Son fenómenos de fusión y transformación que no hay que temer. No hay lenguas puras ni congeladas; estar vivo es cambiar siempre”, concluye el ex vicepresidente nicaragüense, que entre otras actividades homenajeará al gran poeta Rubén Darío en el primer centenario de su muerte.
Sergio Ramírez
Y si de retos y oportunidades se trata, Paz Soldán aporta su punto de vista sobre la evolución del idioma de Cervantes en Estados Unidos: "Ahora el español está presente en todas las comunidades, no solo en las grandes ciudades". 
"Choca con las ansiedades norteamericanas con respecto a su deseo de tener un único idioma, a la política conservadora del 'English only', y también choca con el hecho de que el poder del mercado en inglés es abrumador. Pero la mayor expansión demográfica de las comunidades hispanas ha hecho que el español ya no sea ese idioma arrinconado que solía ser hace 30 años", analiza.

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